jueves, 30 de abril de 2015

SOBRE LA CONVENIENCIA DE SEPARAR A LOS GEMELOS O MELLIZOS EN EL COLEGIO.

En las escuelas separan sistemáticamente a los hermanos múltiples (mellizos, gemelos, trillizos) porque así lo exige la normativa



Me consultaba una madre de mellizas de tres años si veía bien que a sus hijas las separen en la escuela donde van a entrar el próximo curso, porque le habían dicho que estarían en clases diferentes, por la normativa existente, y era la primera vez que se iban separar. Le preocupaba como les afectaría porque tienen una unión especial.
Bajo mi punto de vista no hay un argumento lógico que justifique esta separación, no obstante, al ser una normativa, busqué para informarme por las redes sociales, donde encontré  este artículo, de la lucha de una madre para que sus hijas permanezcan juntas en la escuela.

Lo considero muy interesante y lo publico íntegramente, acompañándolo del vídeo de la entrevista que Pilar Martínez realiza a esta madre, Meritxell Palou.

En este artículo se analiza la situación de muchas familias con hijos múltiples (gemelos, mellizos, trillizos, etc..) en la escolarización, debido a que la educación en colegios y guarderías en España, y en otros países, suele separar a los hermanos múltiples por decreto, y esto representa un problema para algunas familias.

Explicamos a continuación por qué.


Esta separación de los hijos múltiples, está basada en el desconocimiento de los colegios de educación tradicional sobre el comportamiento de estos niños. Los colegios pensaron en algún momento que es mejor tener separados a estos hermanos, por razones no probadas, como la de que si están separados conseguirán relacionarse mejor con otros niños, o porque cuando están juntos se distraen mucho en las clases… Y aún ahora, no se han preguntado si esto es cierto, o si se pueden cambiar las normas para mejorar.

Los padres de estos niños pueden no estar de acuerdo con la separación en la guardería o en el colegio, y a veces no pueden hacer nada por evitarlo, y lo que puede ser más grave, muchos de estos niños tampoco quieren separarse de sus hermanos en el colegio. Y en el fondo, no habría ningún problema ni para ellos, ni para el colegio por estar juntos en las clases. Es más, puede suponer un beneficio para muchos de los hermanos múltiples, mantenerlos juntos en las clases, siempre que ellos estén de acuerdo.

Meritxell cuenta que la figura fundamental para cambiar estas normas en un colegio es el director del colegio.

Meritxell ha luchado por que sus hijas mellizas permanezcan juntas en la guardería y en el colegio, y de momento lo ha conseguido, aunque no sabe por cuánto tiempo podrá mantenerlas juntas en las aulas.

Incluso en México ha conseguido transformar algún colegio en este sentido




Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales. Cualquier duda te puedes poner en contacto con el Gabinete de Psicología de Josefina Rodríguez Merino y su departamento de Psicología Infantil.



|

|

|

lunes, 27 de abril de 2015

DETERIORO DE LA SEXUALIDAD EN LA PAREJA

Es posible mantener relaciones sexuales sin sentir amor, pero es difícil estar enamorado sin sentir un deseo sexual hacia la otra persona






La disminución del deseo sexual dentro de la vida conyugal es un fenómeno muy frecuente pero no es necesariamente un indicador de desamor porque el deseo sexual está influido por múltiples factores:

  • Un acontecimiento que puede afectar en gran medida a la sexualidad de la pareja es el nacimiento de los hijos. La llegada de un hijo comporta una disminución en la frecuencia de las relaciones  causada por un mayor cansancio, por las atenciones dispensadas al hijo, el estrés que comporta la nueva situación, cansancio por dormir poco o un descuido de la relación de pareja.

  • El estrés, cansancio, la falta de tiempo libre, preocupaciones laborales o de cualquier otro tipo.

  • Problemas en la comunicación, dificultades económicas, son factores que van a influir en el deterioro de la vida sexual.

  • Disfunciones sexuales persistentes como la presencia de anorgasmia, eyaculación precoz, erección precaria o inhibición del deseo sexual.

  • Enfermedades, efectos secundarios de algún medicamento (los antidepresivos, por ejemplo, disminuyen la libido), consumo de drogas y abuso de alcohol.

  • Diferencias en el grado de deseo sexual de los miembros de una pareja. Cuando éstas diferencias son grandes pueden ocasionar un desajuste importante en la relación. El miembro en el que el deseo sexual es menor, se puede sentir agobiado y presionado por su pareja, temiendo que le solicite relaciones cuando no le apetece por las discusiones que derivaran de su negativa. El de mayor deseo se sentirá incomprendido, no deseado por su pareja, pueden aparecer temores o celos infundados, provocando la aparición sentimientos negativos (baja autoestima, ira, o resentimiento) que convertirán la sexualidad en un grave conflicto.

  • El paso del tiempo. Al comienzo de la relación, la sexualidad cobra una gran relevancia pero con el paso del tiempo la frecuencia de las relaciones sexuales disminuye  y  tienden  a ser rutinarias

Los problemas en el terreno de la sexualidad contribuyen a la creación y/o al mantenimiento del conflicto en la pareja, conflictos que, como un circulo vicioso, influirán en las relaciones sexuales.

Si una pareja no se esfuerza por cultivar la magia, la sorpresa, los encuentros imaginativos, si no alimenta el romanticismo, la ternura y la pasión, entonces, sus encuentros sexuales, su espacio para la intimidad, se va a caracterizar por la inercia y la rutina y su relación será muy pobre por lo que respeta a la intimidad y sobre todo a la pasión. Para no caer en esta trampa, ambos miembros deben cuidar la relación, estar atentos a las necesidades del otro miembro y  mantener su propia capacidad de atracción.

Una vida sexual activa, incrementa el grado de satisfacción en general y sobre todo en la  relación  de pareja y va a ser un instrumento muy valioso para que puedan enfrentarse mejor  cualquier problema que pueda surgir.


Consejos para evitar la rutina en las relaciones sexuales

El tiempo dedicado sexo debería depender del deseo, cuando se tengan ganas, porque no es una obligación ni  una rutina,  no debe regirse por una hora o momento del día o de la semana (ej, sábados por la noche)

La relación sexual  consiste en disfrutar dos personas dando y recibiendo placer, con  tiempo para la estimulación, con juegos, caricias, utilizando la fantasía, pero sobre todo disfrutando de las sensaciones.

Desechando tabúes, sin inhibirse, porque   son compañeros, cómplices,  con quien se comparte la intimidad. Lo mismo que se expresan las preferencias de una comida se debe hacer con el sexo. Estar abiertos a cambios como tener sexo en otro lugar, experimentar nuevas posturas, darse masajes sensuales, utilizar determinada lencería, etc.

Los hijos suelen limitar en muchos casos las relaciones sexuales, pero siempre se puede buscar un tiempo para la pareja, aunque la frecuencia pueda ser mas limitada, no debe ser así con la calidad de la relación. Se puede y se debe compaginar relación con los hijos y relación de pareja

Hay algo que ambos deben recordar siempre: el mundo del sexo ofrece muchas posibilidades, que  hay mucho por hacer, por descubrir, muchas estrategias para conseguir orgasmos y placer,  que hay que esforzarse, interesarse por el tema, interesarse por llevar una vida sexual que les haga felices y que evite  la rutina porque se puede y se debe hacer a cualquier edad y que no importa la cantidad, si no la calidad

Si  creen que están pasando por una crisis sexual  y que no saben como resolverla, la recomendación es acudir  a un  psicólogo    que les  orientará en las pautas a seguir para lograr  una mejoría en su relación íntima

Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales. Cualquier duda te puedes poner en contacto con la Gabinete de Psicología de Josefina Rodríguez Merino y su departamento especializado en Terapia de Parejas.


|
|
|

jueves, 23 de abril de 2015

NIÑOS DESOBEDIENTES, VIDEO

Es normal la desobediencia en los niños, si esta desobediencia es frecuente debemos educarlo en obedecer las órdenes.


Requisitos básicos que debemos tener en cuenta cuando le damos una orden:
  • Utilizar  un lenguaje adaptado a su edad para que las comprendan
  • Que sean capaces de cumplir
  • Ordenes adecuadas a su edad
Las ordenes que no se cumplen  han de tener consecuencias negativas  que hemos de poner muy claras

Cuando cumplir las ordenes tiene consecuencias positivas son más fáciles de obedecer




Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales. Cualquier duda te puedes poner en contacto con el Gabinete de Psicología de Josefina Rodríguez Merino y su departamento de psicología infantil.



|

|

|

lunes, 20 de abril de 2015

LA DEPRESION INFANTIL. CÓMO PUEDEN ACTUAR LOS PADRES.

El niño con depresión se siente mal pero no puede decir lo que le pasa porque no lo sabe.

 



Sospechamos que padece depresión cuando manifiesta  un conjunto de síntomas la mayor parte del día y  durante varios días. 

 

SÍNTOMAS DE LA DEPRESIÓN INFANTIL

 


  •        Tristeza, con llanto fácil por cosas sin importancia o de repente, irritabilidad, mal humor
  •        Quejas somáticas, se quejan  de que les duele algo, la queja más frecuente es el dolor en el vientre por las mañanas, cuando se despiertan. Estos dolores no se corresponden con ninguna enfermedad
  •         No tiene ganas de hacer las cosas con las que disfrutaba: jugar al fútbol, salir con los amigos…
  •         Alteraciones en su rutina de sueño: duerme menos o duerme mucho. Pueden reaparecer miedos ya superados  o aparecer otros nuevos. Es posible que busque la protección de los padres ante el malestar que siente, pidiendo dormir con ellos.
  •         Un cambio notable de peso o en la forma de comer, ya sea mucho o poco.
  •          Cansancio, sensación de agotamiento físico que le dificulta para hacer las tareas cotidianas a las que estaba acostumbrado.
  •         Dificultad para concentrarse y memorizar que interfieren en el rendimiento escolar.
  •         Sentimientos de que no vale para nada o de culpa sin una razón clara.
  •          Preocupaciones o rumiaciones sobre la muerte, enfermedad, abandono, etc.

 

QUÉ PUEDEN HACER LOS PADRES PARA AYUDAR A SU HIJO

 

Recabar información

Lo primero y más importante es una consulta medica para descartar cualquier enfermedad o trastorno que le esté provocando estos síntomas, por ejemplo una anemia, infección de orina, etc.

Hablar con el niño para averiguar qué situaciones han podido o pueden estar influyendo en su estado de ánimo:


  • En la familia: nacimiento de un hermano, enfermedad de algún familiar, discusiones de los padres, separación matrimonial, ambiente de estrés, exigencias elevadas hacia el rendimiento de  los niños, rigidez, malos tratos etc.
  • En el colegio: incidentes de algún tipo por parte de los profesores o de algún alumno. Acoso escolar
  • Amistades, ha podido rechazarle o ridiculizarle algún amigo/a
  • Redes sociales, controlar con quien se relaciona, si le están haciendo chantaje.
  • Cambios ambientales, desplazamiento a otra ciudad o barrio

Recabar información del colegio, amigos y redes sociales que utilice, pero con mucha discreción porque no suele gustarle a los niños, sobre todo cuando son adolescentes.

Saber que: 

  • Los síntomas son reales, el niño no se los está inventando.
  • Los hijos no interpretan  sucesos, conversaciones o comentarios como los adultos. Los padres hablan delante de los hijos de problemas o dificultades  que  no revisten mayor importancia pero los niños pueden magnificar su interpretación y causarles una honda preocupación o angustia


Seguir un plan de ayuda:
  • Comprenderle y tranquilizarle, haciéndole entender que está pasando por una enfermedad, que aunque se sienta mal no es grave y que se le va a pasar pronto porque vosotros, los padres, que para él sois las principales figuras de apoyo, seguridad y confianza, estáis ahí para ayudarle.
  • Vigilar la alimentación, que tenga una dieta saludable.
  • Fomentar, animando pero no obligando y  de forma paulatina, la salida o visita de algún amigo y la actividad física.
  • Reducir  el estrés. Puede ser necesario hacer cambios a corto plazo en la cantidad de tareas escolares o actividades.
  • Fortalecer su autoestima destacando sus habilidades y valores.
  • Enseñarle a buscar alternativas a las dificultades, haciéndole ver que  los problemas sólo son falta de soluciones y que los padres siempre estarán dispuestos a  colaborar  con él para encontrar la forma de resolverlos.
  • Seguir un plan de tratamiento con medicación, si el medico así los prescribe, y psicológico
  • Los resultados terapéuticos no son inmediatos, no hay que desanimarse por eso, la mejoría será progresiva.


Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales. Cualquier duda te puedes poner en contacto con el Gabinete de Psicología de Josefina Rodríguez Merino y su departamento de psicología infantil.


|
|
|

miércoles, 15 de abril de 2015

CÓMO LLEGAR A SER UNA PAREJA IDEAL

Ser la pareja ideal



"Los ideales son como las estrellas. No conseguiremos nunca tocarlos con la mano pero al navegante, en la inmensidad del océano, le sirven de guía para llegar a su destino".


Los ideales son inalcanzables, nunca se cumplirán del todo. Si los utilizamos bien, nos ayudan a construir el futuro porque tienen un gran poder transformador. Son una excelente guía para encauzar el futuro de una relación de pareja, por lo que es conveniente conocer:

  • QUÉ IDEALES TIENE MI PAREJA PARA COMPROBAR SI CONTAMOS CON DATOS REALISTAS QUE NOS AYUDEN A APROXIMARNOS.
  • SI LAS EXPECTATIVAS QUE TIENE UNO DE FUTURO COINCIDEN CON LAS QUE TIENE EL OTRO MIEMBRO DE LA PAREJA
ANALIZAR:

  • Qué expectativas de lo que esperaba de mi relación de pareja tengo  cubiertas
  • Qué expectativas desearía que mi pareja cubriera
  •  Si existen posibilidades de que esas expectativas que deseo se puedan llevar a cabo.


Ser miembro de una pareja es un acto voluntario, no ha de ser un mal menor (dentro de lo malo, es lo menos malo)

El objetivo de entrenarnos para ser  una pareja mejor forma parte del propio crecimiento al ser  un proyecto personal y compartido. Lo hemos de hacer para nosotros mismos, no para contentar a nadie.

Queremos superarnos a través de mejorar la manera con la que desarrollamos nuestro rol de pareja.Lo mejor de este camino o proyecto es el propio crecimiento, el esfuerzo por mejorar.

Ser una buena pareja es sinónimo de tener una relación madura, respetuosa con la independencia del otros y colaborar en el crecimiento mutuo.

Ser una pareja ideal es la antítesis de tener una relación de dependencia.


TENEMOS MAS POSIBILIDADES DE APROXIMARNOS A SER UNA PAREJA IDEAL CUANDO:



  • Se establecen rituales comunes, como por ejemplo rituales de celebración.
  • Se crean visiones comunes de cómo ha de ser  el futuro o la relación ideal.
  • Se establece un proyecto común con un significado importante. 
  • Se redacta una especie de “constitución” de la pareja, que refleje los principios en los que se basa la relación y se definan normas básicas de convivencia y de organización de la vida cotidiana.
  • Se gestiona el significado de palabras clave importantes como por ejemplo: “pareja”, “fidelidad", “hogar”... Atribuir significados diferentes puede ser una fuente de discrepancias y conflictos.
  • Se intenta apoyar a la otra persona en su crecimiento personal.
  • Se respetan los espacios, sentimientos y tiempos del otro
  • Se crean espacios de diálogo, comunicación y negociación. Los espacios pueden ser tanto físicos como temporales.
  • Nos damos cuenta de los prejuicios  amorosos que nos impiden ver a la otra persona tal y como es, porque estamos mas interesados en como creemos que debería ser
  • Se atiende a los propios sentimientos y necesidades, como paso previo para atender las necesidades de la otra persona.Si yo no estoy bien será mas probable que mi pareja no esté bien.
  • Se piensa en dar antes que en recibir, aunque nadie puede estar dando de forma prolongada sin recibir.
  • Se tiene voluntad de servicio a la pareja. El servicio bien entendido pasa por dar a nuestra pareja aquello que realmente necesita, que a veces no es lo mismo que lo que quiere o expresa.

Esta es una lista a modo de ejemplo


¿Cómo seria tu relación de pareja ideal?


Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales. Cualquier duda te puedes poner en contacto con el Gabinete de Psicología de Josefina Rodríguez Merino


|
|
|

domingo, 12 de abril de 2015

COMO EVITAR QUE NUESTROS HIJOS SEAN JOVENES DELINCUENTES. VIDEO

El juez Calatayud opina que vivimos en una sociedad  en la que se han perdido valores como el esfuerzo, la responsabilidad y el estudio. 

Las familias, primeras responsables de educar a los hijos, tienen dificultad para poner límites y  la autoridad que corresponde a los padres, necesaria para el cumplimiento de normas y valores, se ha diluido de tal forma que hoy día decir no a un adolescente puede llegar a ser fuente de serios conflictos. 



Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales. Cualquier duda te puedes poner en contacto con la psicóloga Josefina Rodríguez Merino



|

|

|

jueves, 9 de abril de 2015

FOBIAS DE IMPULSION: MIEDO INTENSO A VOLVERSE LOCO, PERDER EL CONTROL Y HACER DAÑO A ALGUIEN O A SÍ MISMO

Muchas personas que sufren trastornos de ansiedad pueden haber desarrollado un intenso temor a perder la razón o volverse locos


Como consecuencia hacer algo horroroso a sí mismos (suicidarse) o agredir a personas de su entorno más cercano.



Los pensamientos o imágenes realizando esos actos que temen, aparecen de forma automática, son recurrentes y  perversos y generan en la persona un estado constante de alerta para evitar las circunstancias que temen. Quienes los padecen piensan de sí mismos que son malas  personas porque se creen capaces de cometer eso  que tanto les horroriza.

Algunos de los ejemplos que más repiten y que suelen darse en forma de imágenes mentales cometiendo esos actos:
  • Pensamiento de que va a desear tirar a un hijo pequeño por el balcón o ahogarlo con la almohada mientras duerme.
  • Ante la presencia de cuchillos temor a perder el control y  matar a sus hijos u otros miembros de la familia.
  • Miedo a que le aparezcan deseos de estrellarse con otro vehículo cuando va conduciendo por la carretera o de atropellar a algún peatón  voluntariamente.
  • Temor a suicidarse tirándose por un balcón.


Las personas que padecen este tipo de miedos no tiene la intención de hacer nada  de eso, todo lo contrario, están en una constante alerta para prevenirlo y de  hecho no harán lo que temen porque sólo es miedo a perder el control, es un riesgo absolutamente inexistente.

Otros síntomas y manifestaciones de la ansiedad, que genera un elevado temor en los pacientes son  las  sensaciones  de extrañeza e irrealidad, como si estuviéramos viendo la realidad “como en una película”, como si nos sintiéramos ajenos a nosotros mismos (despersonalización) o al entorno (desrealización).

Estos pensamientos, sensaciones de irrealidad  o imágenes  (viéndose a sí mismos realizando lo que temen)  llamadas fobias de impulsión, son síntomas de ansiedad elevada, pero aunque  no tienen nada que ver, muchas pacientes lo interpretan  como si se estuvieran volviendo locos o tuvieran esquizofrenia, pero es imposible volverse loco como consecuencia de crisis de pánico u otros trastornos de ansiedad.
Las personas que tienen fobias de impulsión tienen un sufrimiento y temor tan elevado que interfiere de forma significativa en su vida cotidiana. Al no comentar con nadie su angustia y temores  difícilmente van a recibir ayuda.

Durante la terapia lo primero que hacemos es ayudarles a perder el miedo a volverse locos y tranquilizarlos porque el riesgo de que cometa esos actos que tanto teme es inexistente, ni corre peligro él ni otras personas. Se le enseña  las distintas formas de manifestarse la ansiedad y como  sus pensamientos, muy molestos  pero no graves, están  provocados por  el nivel de  ansiedad que padece.

Los tratamientos que han demostrado mayor efectividad para este tipo de problemas de ansiedad es la terapia cognitivo conductual, basada sobre todo en el control de  los pensamientos. Mediante esta terapia las personas aprenden técnicas de relajación,  control de los pensamientos   y a modificar las posibles causas de la ansiedad.

Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales. Cualquier duda te puedes poner en contacto con el Gabinete de Psicología de Josefina Rodríguez Merino


|
|
|

lunes, 6 de abril de 2015

QUÉ DIFERENCIAS HAY ENTRE PSICÓLOGO Y PSIQUIATRA

¿A QUIÉN ACUDIR, AL PSIQUIATRA O AL PSICÓLOGO?







Existe confusión entre ambas especialidades, de forma que a veces no se sabe cuando hay que acudir a una u otra especialidad. Con este artículo queremos aclarar de manera sencilla y sintetizada las diferencias.

Tanto la psicología sanitaria o clínica, como la psiquiatría son profesiones que se ocupan de la salud mental de las personas.


El psiquiatra estudia medicina y posteriormente se especializa en psiquiatría, el psicólogo durante toda la carrera ha estudiado como valorar, diagnosticar y tratar trastornos y/o patologías  psicológicas.

El psiquiatra, como medico que es, tiene un enfoque de los problemas psicológicos centrado en la química o fisiología que los provoca, enfocando el tratamiento con fármacos.

El psicólogo enfoca sus intervenciones terapéuticas en dotar al paciente de habilidades y técnicas para controlar su trastorno.


Existen psicopatologías que precisan de la intervención de ambos profesionales de forma coordinada, lo que facilitará una mejor recuperación del paciente Por ejemplo ante una depresión grave la prescripción de antidepresivos  por parte del psiquiatra ayudará  a mejorar por los químicos administrados al paciente; el psicólogo  tratará de la modificación del estilo de pensamiento y de determinadas formas de comportarse  que subyacen a  la depresión y le dotará  de las herramientas necesarias  para que no se repita.

Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales. Cualquier duda te puedes poner en contacto con el Gabinete de Psicología de Josefina Rodríguez Merino


|
|
|

viernes, 3 de abril de 2015

DEMENCIAS, NIVELES, CLASIFICACIÓN Y TRATAMIENTOS.

NI TODO EL DETERIORO DE LA MEMORIA ES UNA DEMENCIA, NI TODAS LAS DEMENCIAS SON ALZHEIMER



LA DEMENCIA ES AQUELLA SITUACIÓN CLÍNICA EN LA QUE DEJAMOS DE SER QUIÉNES ÉRAMOS PARA SER IRRECONOCIBLES A LOS DEMÁS Y A NOSOTROS MISMOS. 


ES UN LARGO PROCESO DE DETERIORO INTELECTUAL QUE SE INICIA CON EL OLVIDO DE LAS COSAS COTIDIANAS PARA ACABAR CON LA PÉRDIDA DEL YO






UN DIAGNÓSTICO CORRECTO ES FUNDAMENTAL, YA QUE CONLLEVA LA POSIBLE IDENTIFICACIÓN DE LAS CAUSAS TRATABLES DE DEMENCIA, CUANDO EXISTAN, O LA POSIBILIDAD DE ENLENTECER EL PROCESO EN OTROS CASOS

La demencia es un proceso orgánico cerebral que afecta predominantemente a las personas de edad avanzada, de importancia creciente debido al aumento de las expectativas de vida y al consecuente incremento de la longevidad de la población de los países desarrollados.

No se trata de una enfermedad en sí misma, sino de un síndrome; es decir, la expresión clínica de un conjunto de signos y síntomas que pueden darse en un número muy importante de enfermedades, de las que la enfermedad de Alzheimer, por su frecuencia, es su máximo exponente.

La enfermedad de Alzheimer (EA) y las demencias en general, pasan por una serie de etapas. La escala más utilizada para conocer la gravedad del estado de demencia es la denominada Escala de Deterioro Global (Global Deterioration Scale, GDS) propuesta por Reisberg en 1982, en la que se clasifica la demencia en siete niveles evolutivos, según la manifestaciones clínicas que apreciemos. Hay que tener en cuenta, que cada enfermo es distinto y que no todos los pacientes evolucionan siguiendo el mismo patrón. Factores como la personalidad previa, su historia de vida, el entorno familiar y otras enfermedades pueden influir en el curso de la enfermedad.

 A continuación se muestra la clasificación propuesta por Reisberg:

Fase 1: Funcionamiento cognitivo normal.

Fase 2: Funcionamiento cognitivo compatible con la edad, con disminución funcional en el desempeño de actividades ocupacionales o sociales complejas de la vida diaria. Olvida nombres, lugares donde ha guardado objetos y es menos capaz de recordar citas.

Fase 3: Funcionamiento cognitivo compatible con EA incipiente. Olvida citas importantes. Problemas con las actividades de la vida diaria (AVD).

Fase 4: Funcionamiento cognitivo compatible con EA leve. Actividades cotidianas deficientes. Aquí es donde se suelen hacer las consultas.

Fase 5: Funcionamiento cognitivo de EA moderada. El paciente ya no puede pasar sin algún tipo de ayuda y la realización de tareas de la rutina diaria es deficiente.

Fase 6: Deterioro cognitivo moderado-grave. Precisa ayuda para vestirse, bañarse etc.

Fase 7: Deterioro cognitivo muy grave. Perdida del lenguaje, locomoción y conciencia.

Si bien es una enfermedad sin tratamiento curativo, existen fármacos específicos, de eficacia comprobada, que pueden frenar su progresión por un tiempo limitado. Aunque no curan la enfermedad, sí modifican su evolución, favoreciendo en gran medida que la persona enferma mantenga su autonomía durante más tiempo.

Además del tratamiento farmacológico, es importante llevar a cabo un tratamiento NO farmacológico como son las psicoterapias  cognitivas o terapias blandas, presuponiendo un valor añadido a la eficacia de dicho tratamiento. La plasticidad neuronal (respuesta del cerebro para adaptarse a las nuevas situaciones para restablecer su equilibrio alterado), la estimulación cognoscitiva (conjunto de estímulos generados por la neuropsicología intervencionista con finalidad rehabilitadora dentro del contexto de la funcionalidad del sujeto) y las técnicas de modificación de conducta son los pilares básicos en los que se fundamentan los tratamientos no farmacológicos, dirigidos tanto a los enfermos con demencia en los estadios leve y moderado, e inclusive en el que se corresponde con el moderadamente grave, como en aquellos procesos incipientes en los que sólo los déficits de memoria son objetivables.

Es sabido que el envejecimiento conlleva una disminución de memoria que a menudo es motivo de consulta por el paciente. ¿Cómo distinguir entre “olvido benigno por la edad” y demencia? Para establecer el diagnostico de deterioro cognitivo asociado a la edad (DCAE) se requiere la presencia de alteraciones leves, de instauración progresiva y de, al menos, 6 meses de duración en la memoria, el lenguaje, la atención, la concentración, el pensamiento o las capacidades visuoperceptivas. Estos déficits deben estar documentados con los exámenes neuropsicológicos apropiados y hay que descartar que sean causados por cualquier otro trastorno  orgánico o psicológico. Se considera que el DCAE no debe limitar las actividades de la vida diaria o hacerlo mínimamente. El problema reside en establecer dónde termina e DCAE y dónde empieza la demencia. Cualquier paciente catalogado como DCAE debe ser evaluado periódicamente, ya que con frecuencia el DCAE es el comienzo de una demencia tipo Alzheimer.

Aunque cuando pensamos en demencias, lo primero que se nos viene a la cabeza es la Enfermedad de Alzheimer (EA), no todo es EA, existiendo otros tipos de demencia que también se dan con cierta frecuencia.

Así podríamos clasificarlas en demencias subcorticales y corticales:







Subcorticales:


  • La afectación predominante se localiza debajo de la corteza cerebral y el trastorno predominante consiste en enlentecimiento del pensamiento, dificultad para fijar la atención y alteraciones en las funciones ejecutivas (funciones cerebrales que ponen en marcha, organizan, integran y manejan otras funciones) ligadas a estructuras prefrontales. Son frecuentes cambios en la personalidad y en el estado de ánimo. Es habitual encontrar alteración de la marcha, rigidez, movimientos anormales, etc. Entre las demencias subcorticales se encuentran la Enfermedad de Parkinson, Corea de Huntington y Paralisis Supranuclear Progresiva, entre otras.


Corticales

La afectación se localiza en la corteza cerebral. Predominan las alteraciones de memoria, lenguaje, praxias (habilidad para poner en marcha programas motores de manera voluntaria y, normalmente, aprendidos) y gnosias (capacidad de elaborar, interpretar y asignar un significado a la información captada por los sentidos). Los trastornos motores están ausentes o aparecen tardíamente.  Entre las demencias corticales se encuentran la Enfermedad de Alzheimer, Demencia frontal o frontotemporal, Enfermedad de Pick, entre otras.

Cortico-Subcortical

Las Demencias Vasculares tienen un importante componente subcortical, pero con frecuencia existen alteraciones focales corticales (lenguaje, memoria, praxias y gnosias). En el caso de la Demencia por Cuerpo de Lewy difusos, también se observan alteraciones corticales y subcorticales.

La elevada prevalencia de los dos tipos más frecuentes de demencia, la enfermedad de Alzheimer y la demencia vascular, constituye un asunto de primer orden y origina un considerable número de problemas sociosanitarios y familiares, los cuales, junto al progreso en el conocimiento y el desarrollo de nuevas formas de tratamiento, han determinado un incremento notable en el nivel de información de los ciudadanos y una demanda creciente en las prestaciones sanitarias.

Un diagnostico correcto es fundamental, ya que conlleva la posible identificación de las causas tratables de demencia, cuando existan, o la posibilidad de enlentecer el proceso en otros casos.


La demencia es un proceso clínico, crónico y progresivo, en el que los síntomas y necesidades van cambiando y que afecta al propio enfermo y a sus cuidadores. Por ello, se necesita de un diagnostico y evaluación clínica continuada, un plan de tratamiento global de sus necesidades y educación, información y apoyo dirigido tanto al paciente como al cuidador para incorporarlos en la toma de decisiones. De esta forma, se podrán potenciar las capacidades residuales del enfermo, promoviendo su autonomía y aumentando el bienestar y calidad de vida, tanto del paciente como de la familia.


BIBLIOGRAFÍA
Fernández-Ballesteros, R. (Dir.) (2000). Gerontología Social. Madrid. Editorial Pirámide. ISBN:
84-368-1437-1.
Alberca Serrano R. Demencias: diagnóstico y tratamiento. Barcelona: Masson; 1998. ISBN: 84-458-0742-0.

Estamos esperando tus comentarios... y si te ha gustado este artículo no dudes en compartirlo en tus redes sociales, a tus amigos les puede interesar este artículo. Cualquier duda que tengáis sobre el diagnóstico y tratamiento del alzheimer y otras demencias te puedes poner en contacto con el Gabinete de Psicología de Josefina Rodríguez Merino


|
|
|