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viernes, 7 de octubre de 2016

VALORACION DEL COEFICIENTE INTELECTUAL

GABINETE DE PSICOLOGÍA JOSEFINA RODRÍGUEZ MERINO, realiza valoraciones del coeficiente intelectual de niños y adolescentes con edad comprendida entre los 6- 16 años.



Para ello utilizamos potentes instrumentos de medida, homologados y adaptados a la población española.


Estas pruebas nos dan una información amplia y precisa de las habilidades intelectuales del niño y del adolescente que tienen influencia en el desempeño académico.

También nos ayudan a identificar los problemas para buscar las soluciones adecuadas.

Reserve su cita en el teléfono del gabinete de psicología 
686 774 887





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sábado, 19 de diciembre de 2015

JUEGOS PARA DESARROLLAR HABILIDADES EN NIÑOS

Los padres pueden contribuir en casa a entrenar y potenciar la atención de sus hijos intentando que disminuyan su impulsividad al tiempo que juegan con ellos. Este es el objetivo de estos juegos que proponemos porque todos podéis pasar un rato divertido en familia.

Juego para desarrollar habilidades táctiles. (4 años o algo más)


 El guía le muestra a los niños cierto número de pequeños objetos comunes, tales como un bolígrafo, un lápiz, una cuchara, un peine, legumbres (garbanzo, alubia, lenteja) etc. El guía coloca uno de estos objetos en una bolsa o algo parecido, de manera que los niños no puedan verlo. Uno de los niños introduce su mano en la bolsa y  trata de identificar el objeto que está sintiendo. Cuando lo ha adivinado el guía lo saca, coloca uno nuevo dentro de la bolsa y el juego continúa con otro niño que deberá adivinar el siguiente objeto.

Juegos para practicar la memoria auditiva y visual 

- Juego de las cadenas de palabras: el guía inicia la cadena diciendo una palabra (p. ej. “Juanito”), el siguiente jugador debe decir la misma palabra más otra que añada significado a la primera (p. ej. “está”)... pierde el jugador que no es capaz de añadir otra palabra más.

-Juego de completar una historia (puede hacerse en grupo) El guía  cuenta la primera mitad de una historia y los os niños inventan el final.

- Juego del “veo-veo”Juego del cazador de palabras. Cada jugador tiene una serie de palabras en una cartulina que pertenece a una categoría (plantas, flores, animales, nombres propios, nombres comunes...); el guía dice una palabra y dos jugadores al mismo tiempo tienen que buscar quién posee la palabra mencionada, gana el que primero la encuentre.

-Juego de copiar secuencias. El guía   realiza o gesticula diez acciones (por ejemplo: pararse en una pierna, abrir una puerta, tose, canta  etc.). Luego el niño  imita las mismas acciones exactamente como las hizo el guía  y en el mismo orden.

-Juego de espejos. Los niños se colocan en pareja y uno de ellos hace varias gestos o expresiones faciales. El otro niño es un espejo y debe reflejar de manera exacta los gestos del primero.
-Mímica en cámara lenta. Igual que la anterior, sólo que el primer niño actúa y hace expresiones faciales en cámara lenta. Aquí los niños tienen que pensar en escenas pequeñas con gestos cortos.
- El juego de Kim Este juego mejora la memoria, el guia coloca varios objetos comunes en una bandeja, como por ejemplo: Un peine, un bolígrafo o un botón. Los jugadores pasan a dar un vistazo a la bandeja. Luego se retira la bandeja y se remueven algunos de los objetos, o son sustituidos por otros. Los jugadores, individualmente o en grupo tratan de recordar lo que falta o es diferente.

Ejercicios para trabajar la atención de los niños 

-Con un alfiler pinchar una letra determinada ( la “o”, “b”, “p” etc) en un texto escrito (artículo de un periódico o revista).
-Descubrir  errores en dibujos sencillos o analogías y diferencias entre diferentes figuras.
- Completar rompecabezas de letras y de figuras geométricas de dificultad creciente.

- Completar secuencias de trazados. 

- Realizar  los clásicos dibujos de unir puntos.

- En una serie de dibujos muy parecidos localizar los repetidos

- Resolver laberintos, sopas de letras y crucigramas e ir añadiéndoles dificultad.

- Identificar por reconocimiento visual palabras enmascaradas.


- Seleccionar las palabras adecuadas para completar una frase entre una lista dada.

- Realizar juegos de 
barquitos de coloreado: este juego consiste en partir el dibujo en zonas de coloreado. A cada zona se le asigna un color. Después al niño se le dan las referencias: colorea de rojo b-c-d y colorea de verde: a-e-i

- Construir palabras lógicas eligiendo letras entre un conjunto dado. Por ejemplo: (a, o, p, m, s, c, a, t). Pueden hacerlo eligiendo unas cuantas  letras libremente, dándoles un número concreto de letras o que empiecen o terminen por una letra o sílaba.

Ejercicios para practicar la coordinación visomotriz

- Buscar el detalle. En este ejercicio mostraremos al niño diferentes dibujos de objetos, fotografías e imágenes en un periodo breve de tiempo. Después le preguntaremos qué detalles recuerda y le pediremos que nos dibuje la imagen cuidando la disposición, el color y el tamaño, cuantos más detalles recuerde más elogios nuestros recibirá. Puede realizarse también con personajes.

- A clasificar. Consiste en clasificar objetos distintos según un criterio dado o una característica común. Podremos ampliarlo aumentando el número de características comunes y utilizando materiales cotidiano,  ej clasificar botones blancos.

Ejercicios para practicar la relajación y el control de la impulsividad
- Respiración Inspiramos muy despacio permitiendo que el aire entre por nuestros pulmones. Notamos que se hinchan como si fueran globos y después permitiendo que se escape el aire  desinflándose poquito a poco hasta quedar vacío.

- La tortuga en su caparazón. Este ejercicio nos permitirá practicar la relajación muscular progresiva. Nos tumbamos boca abajo y nos convertimos en una tortuga que decide replegarse en su caparazón escondiendo su cabeza y sus patas. Ahora los músculos del cuello, brazos y piernas están en tensión. Pronto vienen los rayos del sol a despertarnos, ahora vamos asomando muy despacito la cabeza y estirando las extremidades hasta que queden relajadas.

- Una carrera muy lenta. El ganador será el último que llegue a la meta realizando movimientos muy lentos y controlando la impulsividad.

-Sentados subimos los hombros intentando tocar las orejas (tensión muscular) después poco a poco los vamos bajando, bajando, bajando...hasta dejar los brazos colgando muy flojos (relajación).


ALGUNOS EJERCICIOS



  



















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miércoles, 16 de diciembre de 2015

JUEGOS PARA RELAJAR A NUESTROS HIJOS DE TRES A CINCO AÑOS

Juegos para que los niños se relajen de manera entretenida y divertida y nos permitan descansar a los padres.

Cuando volvemos de horas interminables de trabajo o  estamos cansados de las pesadas tareas del hogar y necesitamos un respiro… puede ocurrir que  los niños no estén dispuestos a permitirnos ese rato de descanso, que tanto necesitamos, porque estén de lo más activos, inquietos, agresivos....No estamos en condiciones de soportarlos, nos  alteran y empezamos a dar  ordenes tajantes y con cierta agresividad:. NO pegues a tu hermano. NO gritéis, NO corráis, NO brinquéis, NO te subas al sofá,..

Parece que cuanto más nos alteramos más se alteran ellos, como si les hubieran dado cuerda,  por tanto no hemos resuelto nada, todo contrario, la situación se ha desbordado y nos vemos gritando como locos.
Necesitamos otros recursos que nos permitan descansar a la vez que a ellos entretenerse y relajarse, para ello he encontrado por las redes algunas opciones como estos divertidos juegos.

Son  juegos para liberar la energía  con  almohadas y cojines


Derribar el muro


Deben construir un muro de cojines y almohadas lo más alto posible. Para que el muro sea mas estable, se pueden disponer dos líneas de almohadas una detrás de otra.


Al dar la orden de salida, los jugadores se lanzan con gran estruendo y griterío contra el muro para derribarlo.

Cangrejos hambrientos


Dos cangrejos hambrientos se pelean  por un trozo de comida apetitosa.

En el centro de la habitación se coloca un montón de almohadas como si fuera la deliciosa comida. Los cangrejos empiezan desde esquinas opuestas. Sólo pueden avanzar como los cangrejos, es decir, a gatas y hacia atrás, pero...con la barriga mirando el techo.

Los dos cangrejos deben arrastrarse de este modo hacia el montón de almohadas y arrastrar tantas como puedan a sus respectivas esquinas, cogiendo una o varias del montón, colocándoselas encima de la barriga y llevándoselas de vuelta a su casa.

Si en el trayecto se le cae alguna al suelo, deberán regresar todas al centro y volver a cargarlas.

Cuando soy feliz


Antes de empezar, explicaremos a los niños que cuando una persona es feliz suele hacer muchas locuras y que el juego consiste en representar todo lo que se puede hacer en una situación así.


Cada niño/jugador se pone su almohada encima de la cabeza.Se trata de mantenerla en esa posición a la vez que tienen que realizar los movimientos que les indicamos, por ejemplo:

  • Correr muy deprisa sin moverse de sitio
  • Girar sobre sí mismo
  • Saltar y gritar ¡ Viva !
  • Marchar
  •  Bailar
  • Inclinarse..

Al jugador que se le caiga la almohada será el siguiente en indicar los movimientos

Carrera de tortugas

Cada niño con un almohadón. Se colocan en cuatro patas y el cojín encima de la espalda. A una señal deben intentar llegar a la meta al otro extremo del salón, sin que se les caiga el cojín de la espalda. El primero en llegar es el que gana.


Conductores


Se necesita un espacio amplio y con pocos muebles. En este juego los niños son coches que circulan por las calles. Cada uno sostiene su almohada con los brazos estirados.


Los coches empiezan a circular por la habitación en todas direcciones.Unos circulan lentamente, otros pasan volando como locos, un conductor sólo conduce en zig-zag, mientras que otra sólo circula marcha atrás..


De vez en cuando se produce un accidente y dos coches chocan frontalmente.



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martes, 17 de noviembre de 2015

PARA QUE A TU HIJO LE GUSTEN LAS MATEMÁTICAS

Las matemáticas es la asignatura más rechazada por muchos niños llegando a convertirse en un obstáculo el resto de  su vida.



Con algunos sencillos consejos  podéis hacer que vuestros hijos aprecien el aspecto práctico de las matemáticas y  que  les gusten.

Es importante que los niños no escuchen en casa  comentarios negativos sobre las matemáticas porque generaran en ellos una predisposición negativa y posiblemente no les gustarán.

Háblales de las matemáticas que empleas en la vida cotidiana, “a ver si se han equivocado en las vueltas”,“cuanto se ahorra si nos hacen el 10%”,  se van a familiarizar de forma natural con ellas.

Existen juegos en los que se practican matemáticas, ajedrez, juegos de cartas etc. de forma divertida.

Ten un ábaco en casa para que aprendan la posición de los números de forma práctica y las operaciones de la suma, resta, multiplicación y división.

Recomendamos el método Matematics para que el niño aprenda jugando solo con 17 minutos al día


Os dejo este video de Eduardo Sáenz en el que de forma divertida  habla de la importancia de las matemáticas.


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viernes, 16 de octubre de 2015

La ansiedad en la infancia

¿Qué es la ansiedad infantil?

La ansiedad se define como el temor o preocupación excesiva tanto por cosas reales como imaginarias que atormentan a los niños. Esta preocupación les puede generar una gran inquietud o malestar que termina interfiriendo en sus actividades diarias.

Todos, en algún momento de nuestra vida, hemos vivenciado episodios de mayor estrés, por lo que es normal que los niños también lo experimenten. Esto incluso es positivo para ellos ya que les ayudara a encontrar técnicas y recursos por ellos mismos para solventarlo. Sin embargo, cuando estos niveles son demasiado altos, interfiriendo negativamente en las actividades diarias de los niños, deberemos tomar medidas.

Episodios de ansiedad más propensos en el desarrollo de los niños

En edades entre los tres y los seis años, esta ansiedad suele manifestarse ante lo desconocido o lo inesperado. Además, suelen aparecer miedos como es a la oscuridad, algunos animales, a separarse de sus padres…

A partir de los siete años, sus miedos se centran en el rendimiento escolar, deportivo, temores de tipo existencial y miedo a la muerte que suelen ir desapareciendo con la edad. Si estos no desaparecen podríamos encontrarnos frente a un Trastorno de Ansiedad.

En la pre-adolescencia y la adolescencia, sus temores se enfocan más a situaciones imaginadas con anticipación como pueden ser las notas, aceptación de sus iguales o las reacciones de los padres ante determinadas circunstancias. Los síntomas comunes de ansiedad en la adolescencia pueden ser desde una preocupación excesiva por las cosas, pensamientos negativos de uno mismo, comer, beber o fumar en exceso, una elevada inseguridad hasta incluso presentar malestar físico mediante taquicardia, sequedad de boca o dolores continuos de cabeza.

En ocasiones, estos síntomas se prolongan en el tiempo, pudiendo llegar a padecer lo que llamamos un Trastorno de Ansiedad.


¿Cuáles son los trastornos de ansiedad más comunes en niños y adolescentes?

  • Trastorno de pánico: Los niños sufren ataques de pánico a través del sentimiento imprevisto de terror que les llega de repente y sin previo aviso. Los síntomas físicos son: palpitaciones, sensación de quedarse sin aire, dolor en el pecho, mareos, dolor de estómago y angustia de enfrentar la muerte.
  • Fobias simples. Los niños y adolescentes pueden presentar fobias a la oscuridad, las tormentas, el ascensor, a quedarse solos, a la sangre u otras situaciones. La posibilidad de entrar en contacto con el estímulo fóbico genera en él una intensa angustia, evitando incluso la posibilidad de enfrentarse al estímulo fóbico.
  • Fobia escolar: Incapacidad de asistir a la escuela como consecuencia de un miedo irracional de algún aspecto de la situación escolar. Esta se puede dar a cualquier edad.
  • Ansiedad generalizada: En un principio, los miedos y temores suelen centrarse en un aspecto determinado, como puede ser el miedo a los perros o a la oscuridad y van adquiriendo un carácter más general con la edad. El/la chico/a muestra una actitud excesivamente cautelosa y temerosa ante la vida, preocupándose demasiado por casi todos los aspectos de su vida y en ocasiones, esta ansiedad puede terminar siendo somatizada en dolores de cabeza, problemas de estómago, náuseas y trastornos del sueño.
  • Trastorno obsesivo-compulsivo: Este trastorno se caracteriza por la repetición de pensamientos no deseados (obsesiones), y/o realizar algún tipo de acciones que parecen imposible de controlar (compulsiones). Los comportamientos compulsivos más frecuentes suelen ser el contar, lavarse las manos en exceso, abrir y cerrar las puertas un número determinado de veces antes de entrar…

¿Qué podemos hacer para ayudarles a enfrentar estos síntomas de ansiedad?

  1. Habla con tu hijo sobre lo que le preocupa y cómo se siente al respecto. Esto no significa que le forcemos a ello, sino que sepan que estaremos ahí para cuando lo necesite.
  2. Entender la importancia que para él tiene. No hay que restar importancia a sus miedos ni “ridiculizarlos” ya que para ellos sí la tiene y necesitan tu comprensión.
  3. Actuar como modelos para ellos. En la mayoría de las ocasiones, los niños actúan imitando a sus padres, por lo que debemos ser un buen modelo a seguir de cómo afrontar las adversidades y resolver los problemas.
  4. Interesarnos por la evolución de ese problema así como animar sus avances.
  5. No ser excesivamente sobreprotector. Hay que dejar que sea el niño quien afronte sus problemas y que aprenda estrategias para solucionarlos. Los padres no estarán siempre ahí para solucionarles todas las dificultades que se les presenten.
  6. Cuida su autoestima y apórtale seguridad. Además, podemos enseñarles técnicas y estrategias para afrontar estas situaciones estresantes para ellos y que salgan airosas de ellas.

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viernes, 9 de octubre de 2015

MI HIJO NO DUERME BIEN

Son muy habituales las preocupaciones de los padres ante las dificultades que presentan algunos niños a la hora de irse a dormir.


Las más frecuentes suelen ser el hábito del niño a un horario de sueño alterado, miedo a dormir solos o se despiertan a media noche y lloran desconsolados al verse solos o por haber sufrido alguna pesadilla.

Dormir bien es muy importante para su buen rendimiento escolar así como para su salud. Las horas de sueño "repercuten en el rendimiento escolar de los niños y en su humor", concluye el estudio 'Trastornos del sueño en la niñez', de la pediatra Rocío Sánchez-Carpintero, publicado por la Asociación Española de Pediatría en sus 'Protocolos de Neurología'. La experta afirma que dormir menos horas de las necesarias puede provocar alteraciones en el normal crecimiento del niño y, además, puede crear algunos problemas de conducta en los pequeños.

Los problemas del sueño abarcan desde las pesadillas, la somniloquia (hablar mientras duerme), la enuresis (hacerse pipí en la cama después de los 5 años) ,encopresis (hacerse caca encima de forma involuntaria a partir de los 4 años), la dependencia de un juguete para poder dormir, tener que succionarse el dedo pulgar y el no querer irse a la cama a la hora estipulada lo que en ocasiones conlleva a otra serie de problemas como son las rabietas.

En la mayoría de las ocasiones, la solución está en manos de los padres más que de los niños, así que forzar al pequeño, discutir con él o castigarle no sería la medida más efectiva.



¿Cuáles son algunos de los errores que cometen los padres cuando llega la hora de dormir?

  • El primer gran error es acostar a los niños demasiado tarde. Esto, les hace estar demasiado cansados y como resultado conlleva a un mayor esfuerzo para conciliar el sueño así como para mantenerse dormidos. Además, se suelen despertar más temprano, por lo que durante el día permanecerán fatigados.
  • Otro de los errores más comunes es depender del movimiento: En varias ocasiones los padres llegan incluso a montar al niño en coche y pasearle hasta que se duerme. Si el niño siempre duerme con alguna forma de movimiento es probable que no alcance una fase profunda de descanso y una vez cese el movimiento, el niño despierte.
  • Es recomendable, y no todos los padres lo llevan a cabo, el mantener una rutina nocturna, es decir, establecer unas tareas a realizar antes de irnos a dormir. Estas actividades deben ser placenteras y sobre todo tranquilas. No podemos esperar que un niño que ha estado realizando actividades de una alta excitación durante el día, directamente se le apague la luz y se duerma.
  • Otro de los errores que a veces se cometen es la falta de constancia. Si el niño no quiere dormir solo, llora por las noches y a veces se le deja dormir con los papás, otras no y otras es el papá o la mamá quien duerme con ellos, dificultará al niño alcanzar un buen hábito de sueño.
  • Otro factor que influyen de manera negativa es la sobrecarga de estímulos en el dormitorio. Lo mejor para un sueño reparador es una habitación oscura, sin ruidos ni distracciones. No es positivo para ellos el tener una televisión en el cuarto o que se duerman jugando a la consola ya que con ello pueden perder horas de sueño reparador, algo que como hemos dicho, afectará a su humor, salud e incluso su comportamiento.
En resumen, para que podamos lograr esta rutina deseada y que la hora de irse a la cama deje de ser un problema tanto para los niños como para los padres os proponemos una serie de pautas:
  • Proponer una hora fija de irse a dormir.
  • Intentar siempre acostarse y de levantarse a la misma hora.
  • Repetir actividades nocturnas con el niño, recordando que estas deben ser tranquilas y placenteras. Por ejemplo: nos lavamos los dientes, nos ponemos el pijama, leemos un cuento y apagamos la luz.
  • El ejercicio ayuda al niño. Actividades como fútbol, baloncesto, salir a jugar al parque con los amigos…Así, llegarán a la hora de irse a la cama cansados y relajados
  • No jugar con videojuegos por la noche o ver la televisión en su cuarto.
  • Si el pequeño tiene miedo, dejar una luz tenue durante un tiempo, que iremos disminuyendo de intensidad poco a poco hasta conseguir no necesitarla.
  • Evitar que irse a la cama sea un castigo para niño;  es positivo para el niño pasar tiempo en su dormitorio durante el día, ya sea jugando o leyendo, pero no que lo asocie con un momento desagradable debido a que anteriormente acostumbremos a “mandarlo a la cama” como forma de castigo.
  • Cada uno en su cama. Si tras apagar la luz y abandonar la habitación, el niño vuelve a levantarse para ir a vuestro dormitorio, se le acompaña a su habitación y se le calma, pero no volvemos a empezar la rutina de actividades (como podría ser lectura de cuento, etc)
  • No tomar comidas o bebidas con azúcar antes de dormir. La alimentación también influye en la calidad del sueño del niño.

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jueves, 10 de septiembre de 2015

CÓMO FACILITAR LA VUELTA AL COLEGIO

El síndrome postvacacional afecta a los adultos y también a los niños que lo sufren de la misma forma, incluso con mayor intensidad.

¿Cómo podemos hacer más llevadera esta vuelta al cole?

Falta de motivación, nerviosismo y desgana en las primeras semanas de clase hasta que empiezan a adaptarse de nuevo a las rutinas diarias.



Lo mejor sería comenzar varios días antes de la vuelta al cole a levantarles más temprano,  trabajar un poco algunos conceptos de repaso del año anterior (aunque por supuesto, lo recomendable es realizar este repaso durante todo el verano para que su cerebro siga trabajando y no vuelvan de vacaciones con un “agujero negro de conocimientos”) así como adelantar la hora de la cena y  acostarse más temprano, es decir, ir estableciendo horarios para que poco a poco los vayamos adaptando a  una transición de las vacaciones  al horario escolar, cuando llegue el momento.

Es muy importante crear un ambiente que genere  ilusión por volver al colegio: libros y materiales nuevos, volver a ver a los compañeros, hacer nuevos amigos….

¡¡Se puede hacer como los alemanes!! Llevar un gran cucurucho el primer día de clase lleno de gominolas, juguetitos y caramelos para que el comienzo de curso sea lo más dulce posible!!

En ocasiones, tampoco para los padres es fácil y tanto el niño como ellos terminan sufriendo lo que se denomina ansiedad de separación, reflejándose en una preocupación constante por cómo estarán sus hijos en clase.

Debemos tener en cuenta que cualquier emoción ( preocupación, temor etc)  de los padres, se trasmite a los niños sintiéndolas como suyas propias. Por lo que  es muy importante evitar mostrarles nuestra propia ansiedad. Hemos de mostrarnos tranquilos, confiados y alegres para que así sea esta emoción la que se les contagie a los niños. Les ayudan mucho más los mensajes positivos en lugar de negativos, es decir, es más enriquecedor el decir “te lo vas a pasar genial” “ya verás que cantidad de amigos vas a hacer” “cuando llegue a por ti me cuentas todo” haciendo hincapié en lo positivo de la escuela que mensajes del tipo “volveré enseguida” “no estés triste”.

Es bueno  crear una rutina de despedida; es decir, una canción que sea lo habitual cantar de camino al cole, un mensaje secreto que solo entendáis las dos…cualquier cosa especial que se os ocurra de forma que se anticipe la entrada en la escuela como alegre y habitual. No es recomendable dejar a los niños en la puerta del colegio y aprovechar para irse los padres cuando el niño no mira, porque a nadie le gusta sentir que “se van de mi lado cuando no me lo espero” y el próximo día estará expectante ante lo que puede interpretar como un abandono.

Con un poco de paciencia, ilusión y compromiso, la vuelta al cole puede ser un momento feliz para ellos y para nosotros.

ROSA TORRES


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miércoles, 2 de septiembre de 2015

LO QUE NO DEBEMOS DECIR A NUESTROS HIJOS

Errores frecuentes que cometen algunos padres por desconocer las consecuencias negativas que pueden tener en sus hijos.



La niñez es una etapa de la vida donde la educación y las vivencias son sumamente importantes para estas personitas que van desarrollando sus conocimientos del mundo  y su persona, de ahí la importancia de los mensajes que reciben  sobre sí mismos y sus capacidades , sobre todo de personas tan importantes para ellos como son sus padres

Los padres suelen cometer errores bastante comunes con sus hijos, sobre todo en un enfado, sin darse cuenta  de las consecuencias negativas que pueden provocar en su autoconcepto o autoestima.

Cosas que no debemos decir a nuestros hijos

Evita las comparaciones

Sabemos que las comparaciones a cualquier edad son odiosas, pero en la infancia, donde están empezando a formar el concepto de sí mismos, en gran parte a través de lo que dicen de ellos sus padres, frases como “a ver si aprendes de tu hermana” o “tú eres muy vago pero listo, tu hermana sin embargo es muy responsable y constante”  es posible que las interioricen  de forma    “no estudio porque soy vago”.

No equipares lo que es con lo que hace. 

A la hora de juzgar malos hábitos o conductas, siempre recriminarle lo que hace mal, no  su persona. Es importante diferenciar lo que hace de lo que es. La persona no es lo que hace, es mucho más que eso.

No son malos, se han portado mal. No son torpes, les cuesta hacer esto o no tienen habilidad para aquello. Sanciona la conducta pero NO su persona.

No les amedrentes como un recurso para educarlos. Muchas veces, ante la desesperación, cuando un niño no quiere irse a la cama, no obedece etc., utilizamos la estrategias de asustarlos- “no vayas ahí que hay un monstruo” , “si no te duermes, vendrá el hombre del saco” “ te cierro a oscuras en..” . Esta es una de las causas por las que un niño será miedoso y  no querrá dormir solo, tendrá miedo a la oscuridad etc..

Evita las imposiciones, el  ¡ porque lo digo yo!. En ocasiones damos órdenes a los niños  y cuando nos piden explicación les soltamos esa frase tan contundente Es preferible una pequeña explicación,  así el niño interiorizará  por que determinadas cosas no se deben hacer. Aunque la rotundidad de la imposición a corto plazo da resultado a largo plazo hará o dejará de hacer las cosas en presencia de quien le pueda reprender, pero hará lo que no debe en su ausencia. Si interioriza las normas las respetará independientemente de quien esté presente porque formaran parte de su sistema de valores.

Quita ya lo hago yo, que tu no sabes Deja que se equivoque, si el error no acarrea consecuencias importantes, claro. Cuando pidas a tu hijo realizar una tarea, si no la hace bien no  le digas  a ver, déjame a mí, no le ayuda porque  también se aprende  de los errores. Valorar los pequeños aciertos de esa tarea y animarle a seguir con la confianza de que lo va a conseguir, fomentará la seguridad en sí mismo, en su capacidad de conseguir objetivos.  

Las amenazas de retirarle el cariño y la indiferencia pueden ser lo que más daño psicológico  le produzca a un niño. Dejar de hablarle, ignorarle, decirle ya no te quiero, como castigo, es nefasto porque ellos no diferencian entre la realidad y la mentira.

Nacemos sin saber lo que somos y lo vamos aprendiendo por lo que nos dicen o trasmiten nuestros padres,  profesores, compañeros..y las experiencias vividas. Los padres tienen una gran responsabilidad en el desarrollo de la autoestima  de sus hijos.

 ROSA TORRES

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miércoles, 15 de julio de 2015

HIJOS Y TAREAS DOMÉSTICAS

BENEFICIOS QUE APORTA A LOS NIÑOS COLABORAR EN LAS TAREAS DOMÉSTICAS EN CASA


Es importante que los niños colaboren en las tareas domésticas, acordes con la edad, porque contribuye a  su desarrollo personal y social aprendiendo  a asumir  responsabilidades, rutinas en equipo y la satisfacción de realizar un trabajo por el que obtienen  el reconocimiento de los padres.

Los padres tienden a pensar que ya les tocará hacerlo cuando sean mayores, pero se pueden encontrar con adolescentes que, lejos de ayudar dan más trabajo, véase el típico ejemplo del dormitorio desordenado con la ropa por medio, y es que si de niños  no se les  ha educado en las tareas propias de su competencia, en la adolescencia difícil será que lo hagan de forma espontánea. Por ello  la colaboración y el sentido de la obligación hay que trabajarla desde  pequeñitos.

¿Cuáles son los beneficios de la colaboración en casa para los niños?

Aprenden a conocer el mundo que les rodea, le ponen nombre a todas las cosas, para qué sirven y cómo se manejan; aprenden cosas nuevas, interactúan más con el resto de la familia, adquieren capacidad de concentración y perseverancia a la hora de realizar una tarea… Además se sienten útiles, sienten que, mediante su esfuerzo, están aportando beneficios al núcleo familiar.

Al tener labores que realizar, van ganando en responsabilidad y  confianza en sí mismos.


  • Cuando ven como mejoran en la realización de sus tareas y les felicitan por ello, mejora  su autoconcepto y autoestima.
  • Están aprendiendo a ser autónomos y valerse por sí mismos.
  • Al no darles todo hecho se contribuye a su madurez y autonomía.
  • Enseñamos  la igualdad al ver el reparto equitativo de tareas entre toda la familia y que dentro de una familia, podemos y debemos ayudarnos unos a otros.

Y… ¿Cómo hago para que colabore?

Siempre mediante el diálogo y la comunicación. Explicándole por qué es bueno que ayude por ejemplo habrá más tiempo para el juego, ir al parque, etc.

Razonar y motivar son las mejores estrategias para que nuestros pequeños  ayuden en casa.

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viernes, 3 de julio de 2015

ESTILOS EDUCATIVOS DE LOS PADRES

DIME QUÉ TIPO DE PADRE ERES… Y TE DIRÉ COMO SERÁN TUS HIJOS


Cuántas veces hemos dicho mi hijo tiene el mismo mal carácter que su padre,  o es tan desordenado como su madre, sin embargo y aun siendo cierto que el temperamento de cada persona puede ser heredado, la personalidad de cada uno no se trasmite genéticamente, se aprende de los modelos educativos de los padres, por tanto, como cualquier conducta aprendida, se puede modificar.

En la familia está la responsabilidad de trasmitir tanto los conocimientos, como los valores y hábitos que los niños irán adaptando a su repertorio de conductas.



¿Tipos de familias  que podemos encontrar en la sociedad de hoy día y que  consecuencias tendrán en los hijos?


PADRES PERMISIVOS:



Aquí podremos encontrar a padres que no suelen castigar nunca a sus hijos, no les exigen metas u objetivos ni les controlan en el día a día. Los niños hacen y deshacen a su antojo sus propias actividades sin que existan consecuencias de sus actos. Suelen ser padres cariñosos y poco propensos a establecer normas. Además, es usual el ceder casi siempre a las peticiones de sus hijos, consintiéndole demasiados caprichos.

¿Qué efecto provoca esta actitud en los niños?

Estos niños, conforme se van convirtiendo en adultos, suelen padecer problemas de adaptación en la sociedad puesto que carecen de un control adecuado de su conducta sin reconocer ni respetar las normas de la sociedad. Además, al estar acostumbrados a obtener todo lo que quieren en el momento en que lo quieren, no presentan tolerancia a la frustración, es decir, no saben aceptar un no o la espera necesaria para conseguir sus objetivos por lo que les puede suponer algunos problemas en su entorno laboral o escolar con sus profesores o jefes.

En algunas ocasiones estos niños pueden desarrollar conductas agresivas, pueden ser mentirosos a la hora de conseguir lo que se proponen, niños inseguros y con problemas de autoestima ya que se sentirán en numerosas ocasiones frustrados.

PADRES AUTORITARIOS:


En esta tipología se encuadran a los padres que se imponen de forma inflexible a través de normas, sin tener en cuenta la edad de sus hijos ni su opinión. Además, castigan de manera soberana  y en ocasiones con castigos desorbitados al incumplimiento de cualquiera de sus normas. El control sobre las conductas y la vida de sus hijos es total, buscando que éstos se adapten completamente a la  forma de vivir que ellos ven correcta. Este tipo de padres suelen tener pocas muestras de cariño hacia sus hijos y  escasa comunicación. Se ciñen a castigar las conductas negativas que los niños realizan sin  reforzar las positivas.

¿Qué efecto provoca esta actitud en los niños?

La influencia de este estilo educativo en los niños puede ser que aprendan a mentir para evitar represalias de sus padres o por el contrario rebelarse y volverse niños agresivos y desafiantes, actitud  que, en ocasiones, se puede generalizar al ámbito escolar siendo niños desobedientes y problemáticos, además de bastante temperamentales. Presentan bajo control de su conducta y una gran falta de autoestima con tendencias a sentirse culpables y tristes.

PADRES DEMOCRÁTICOS


Son padres  cálidos, a la vez que exigentes y firmes. Estimulan la madurez de sus hijos con   respeto a  las normas, dándole explicaciones lógicas acerca de por qué el castigo, para que ellos lo comprendan y aprendan de sus errores. Siempre utilizan el diálogo  concediendo  importancia a los sentimientos y opiniones de sus hijos.

NO usan el castigo físico y siempre son castigos coherentes conforme a la conducta que quieren sancionar.

¿Qué efecto provoca esta actitud en los niños?


Los hijos de  padres que utilizan el estilo democrático en la educación suelen ser niños seguros, más felices y generosos tanto consigo mismo como con los demás, mucho más competentes socialmente, responsables y con un control mayor en su propia conducta.

Poseen una adecuada autoestima, son más independientes y sus niveles de agresividad y hostilidad suelen ser mucho más bajos.

En resumen, es importante el saber escuchar, negociar,  intentar que la educación no se base en gritos, saber hacer cumplir los castigos impuestos y que estos siempre sean  coherentes y contingentes con  la conducta, es decir, que no se prolongue en el tiempo sino que se lleve a cabo de manera seguida  a la conducta que queremos extinguir.

De la forma  de educar dependerá que los niños crezcan y maduren de una manera sana y conociendo la mejor forma de adaptarse a la sociedad en la que viven y a las posibles adversidades que se encuentren en su día a día.


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