La timidez es un problema cuando uno mismo no se permite relacionarse con los demás como le gustaría, por inseguridad o vergüenza.
Sin que medie palabra suelen "adivinar" los juicios negativos que hacen de él y obra en consecuencia.
La persona tímida no lo es en todas las circunstancias ni con todas las personas, no lo es
con sus hijos, su pareja, padres o hermanos. Vencer la timidez consiste en generalizar esa espontaneidad, la manera propia
de ser ante las personas que tu elijas.
Algunos consejos para vencer la timidez:
1.
Empieza practicando con personas conocidas
algunos ejercicios sencillos: habla mirando a los ojos, si te resulta muy incomodo
hay un truco: mira al entrecejo de la otra persona, parece que le miras a los
ojos y no te agobia. Sonríe si es oportuno. Utiliza conversaciones sin importancia, triviales,
observa lo que habla la gente cuando esperan en la panadería, en la peluquería…
Pregunta algo…. Cuando te sientas más seguro prueba a hacer lo mismo con personas que no
conozcas tanto.
2.
Ensaya formas de romper el hielo. Suele costar llevar una conversación con un
desconocido al principio. Piensa en formas de romper el hielo e iniciar una
conversación, como sonreír a una persona que conoces de verla varias veces, por ejemplo
un vecino con el que coincides en el ascensor, empieza con algo tan sencillo
como ¿vive aqui? . Presentarte con un hola,
que tal soy Juan. Preguntar algo del tipo ¿tienes hora?. Tener pensadas varias fórmulas para romper el hielo resulta
más fácil.
3. Ensaya lo que vas a decir. Cuando estés preparado para probar algo que has
estado evitando por culpa de la timidez —como una llamada de teléfono o una
conversación— escribe previamente lo que quieres decir. Ensáyalo en voz alta,
tal vez delante de un espejo. Luego lánzate. No te preocupes si no te sale como
te hubiera gustado, lo que más importa es que lo hayas hecho. Siéntete
orgulloso de haberte atrevido a probarlo. La próxima vez, todavía te saldrá
mejor porque te resultará más fácil.
4.
Amplia tu circulo. Inicia alguna
actividad que te guste y que puedas relacionarte con otras personas que
compartan el mismo interés. Date tiempo para ir conociéndolas e ir cogiendo
confianza en ti mismo, sin sentirte obligado a hacerlo. A las personas tímidas
a menudo les preocupa no estar a la altura o qué pensarán de ellas los demás. Esto
suele frenar a los timidos para hacer lo que les gustaría. Si en tu caso la autocrítica desempeña un
papel importante, pregúntate si serías tan crítico con tu mejor amigo. Lo más
probable es que con él no fueras tan exigente y lo aceptaras tal y como es. O
sea que trátate como a tu mejor amigo. Date palabras de aliento en vez de
esperar el fracaso.
5.
Desarrolla la asertividad. A las personas tímidas les preocupan
mucho como pueden incidir en los demás lo que ellos digan o hagan. Esto no
significa que sean “miedosas” o “cobardes” sino que no suelen ser asertivos, les cuesta decir NO sin sentirse culpables.
Ser asertivo significa defenderte cuando deberías hacerlo, reclamando lo que
quieres o necesitas, o expresarte cuando otra persona está hiriendo tus
sentimientos.
Sobre todo, sé tú mismo, es lo mejor que puedes ser. Está bien que
pruebes distintas formas de relacionarte o conversar que utilizan otras
personas. Pero haz y di lo que encaje con tu propio estilo. Ser tal y como uno
es —y atreverse a mostrárselo a los demás- es lo que más atrae a la gente y la
mejor forma de hacer amistades.
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